domingo, 27 de mayo de 2007

VERÓNICA PT.1

A partir de hoy empieza la publicación de "Verónica" un cuento/anecdota en tres partes. Que la disfruten
La llamada llegó alrededor de las 11 de la noche, Verónica había salido a una fiesta a Coyoacán y no se sabía nada de ella, tendría que haber llegado a las 10 y no contestaba el celular. La solicitud era que la familia se movilizara para buscarla en las calles de Coyoacán, una auténtica locura, pero además la madre de la criatura esperaba que alguien llamara al tío que trabajaba en la PFP, no hubo voluntarios, aún no era una situación que ameritara despertar al volcán.
La nena apareció a la 1 de la mañana, hora por demás preocupante para su madre, tomando en cuenta que su hijita tenía, en ese entonces, 16 años y siempre había estado bajo el ojo vigilante de sus padres. Pasó la situación y unos meses después cayó la bomba, estaba embarazada, 6 meses para ser exacto, parece ser que la fiesta en Coyoacán estuvo bastante divertida. Ya no se inscribió al siguiente año escolar, el padre, taxista de profesión, acepto hacerse cargo del hijo, dentro de lo malo podría haber sido peor.

Nació el niño y Verónica estaba inscrita para siguiente curso escolar, había engordado bastante durante ese año “sabático”. El sábado anterior al inicio de cursos volvió a desaparecer, esta vez por la tarde, mientras su madre acompañaba a la abuela al médico (había sufrido un accidente en las escaleras unos meses antes y le habían reconstruido medio rostro), en esta ocasión hubo una nota de despedida, se había ido con el padre de su hijo (y el hijo), pero eso no era todo, tenía 7 meses de embarazo (si, de nuevo) y nadie se había dado cuenta, finalmente la gordura no era tal, sino la niña que nacería.

El padre era el mismo, su fuente de riqueza también, la educación de Verónica no había avanzado un ápice, serían dos bocas que alimentar y por ahora vivían por six flags en casa del cuate. La respuesta por una parte de la familia fue, que si estaba dispuesta a hacerse cargo, como lo había demostrado fugándose, pues que se le dejará, puesto que había dado la espalda al apoyo recibido saliendo con su gracia nuevamente.
CONTINUARÁ.

1 comentario:

EL PESIMISTA HORMONAL dijo...

Me acordé de que en el lirbro "Si fuera sombra, te acordarías" el autor narra algo muy chusco que recordarás, de uno de sus amigos de Nezayork que iba a ser doctor, o bueno, más bien sus papás tenían esa ilusión y hasta ya estaban ahorrando y reservándole un cuarto para que pusiera su consultorio, pero él se tomó muy en serio eso de estudiar anatomía, sobre todo la femenina, y que preña a la novia. Y ahora muchos años después, llega a su casa sobándose el lomo cansado de vender enciclopedias de puerta en puerta.